Crónica del Pasaje del Terror

 

      El pasillo del terror es una actividad que realizamos todos los años en el día de Halloween. Consiste en aventurarse por uno de los pasillos del instituto al estilo “Casa del Terror”. Está organizado por profesores y profesoras con ayuda de sus alumnos/as, quienes participan aportando material a la decoración del pasillo y disfrazándose para asustar a aquellos “valientes” que se adentren en el pasaje del terror la mañana del 31 de octubre.

     Ese día, subimos todas las clases por turnos a la tercera planta. La mía, 3º A, subió a tercera hora a probar valentía (o cobardía).

     Los pasillos eran oscuros y la zona del pasaje estaba oculta por un manto negro que impedía ver lo que sucedía dentro. Cuando entramos, nos encontramos con una profesora disfrazada de enfermera que nos mandó a callar (una hazaña imposible) y cuando consideró que estábamos listos nos pidió entrar.

 Todo estaba negro, apenas se podía vislumbrar un mísero rayo de luz y, de repente, se abrió la puerta de una clase y salió una persona disfrazada de la muerte que asustó a todos y que se acercaba a la gente de forma escalofriante. Entramos en ella. No se podía ver prácticamente nada. La mayoría de nosotros iba andando casi a ciegas, con personas gritándonos y nosotros sin poder ver de dónde nos veían los tiros. Lo único que podíamos hacer era seguir hacia delante con precaución hasta llegar a la salida mientras intentaban asustarnos por lo menos 20 personas. Tras salir de ahí, a la vuelta, entramos en otra clase en la que se repetía el circulo vicioso.

 Mucho miedo no es que diera pero, eso sí, divertido era pues las interacciones entre las personas y los asustadores eran bastante graciosas.

                                                                                                                     Rafael Gómez Estepa, 3ºESO A